Melancólica, mi alcoba solitaria
desprolija y abandonada
la alcanzaba la locura
de una pasión desbordada.
Todo la inquietante mezcolanza
hablaba hasta por las claras
que imperaba un desatino,
cosas de la desesperanza.
Flanqueada por paredes blancas
y un cortinado naranjas,
¡Hay! perdí las esperanzas
de acomodar sin tardanza.
Pobre mi cuarto, mi alcoba
tan melancólica y sola
por un momento supuse
que era un barco en sozobra.
Y entre matices de aurora
mi vanidad es siempre mas fuerte
todo ha vuelto a su lugar, por suerte
¡Quien te ha visto y te ve ahora!
desprolija y abandonada
la alcanzaba la locura
de una pasión desbordada.
Todo la inquietante mezcolanza
hablaba hasta por las claras
que imperaba un desatino,
cosas de la desesperanza.
Flanqueada por paredes blancas
y un cortinado naranjas,
¡Hay! perdí las esperanzas
de acomodar sin tardanza.
Pobre mi cuarto, mi alcoba
tan melancólica y sola
por un momento supuse
que era un barco en sozobra.
Y entre matices de aurora
mi vanidad es siempre mas fuerte
todo ha vuelto a su lugar, por suerte
¡Quien te ha visto y te ve ahora!
No hay comentarios:
Publicar un comentario